Es el calor que recorre mi cuerpo el que se adueña de mi mente y mi alma.
Afuera hay una tempestad, los árboles se sacuden y se quejan, están llorando porque no pueden ver, están llorando porque no pueden escucharnos.
Las nubes se arremolinan y chocan, llenando nuestros oídos con sus roncos quejidos.
Ya no te veo entre las sombras danzantes, ya no te escucho porque la noche grita muy fuerte.
No sueltes mi mano ni por un segundo porque puedo perderme. No dejes que tu cuerpo se aleje del mío porque regresará el frío. Deja que la música que hay en mis ojos te domine y que el perfume de las flores te controle.
El viento golpea con fuerza la ventana y los frágiles cristales están a punto de ceder. El viento quiere entrar y envolvernos, pero no lo hará, porque yo no deseo que sea su roce el que me haga temblar.
Escucha las campanas con su lejano tañido y no retires tus labios de los míos ni enciendas la luz. Me bastan las velas y su fuego, que se regodea por compartir la danza de dos almas. No me dejes ir sola al abismo que trae la noche... Entra conmigo y encendamos el lugar.
Agárrame con fuerza y no te sueltes, que me invade el frío si te vas.
2 pensamientos:
¿Como te voy a soltar si te metes por mis ojos y te coses a mis pulmones?
Te amo.
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